Los trabajadores reclaman mejores un aumento salarial frente al 10% de inflación que se vive en el territorio británico.
En el día de hoy, las líneas de ferrocarriles británicos suspendieron su servicio en el marco de una nueva huelga en donde los sindicatos reclaman un aumento salarial frente al récord inflacionario que se vive en la región. En junio, los trabajadores ferroviarios pararon por primera vez en treinta años y se movilizaron en una jornada que fue organizada en conjunto por los cuatro gremios principales de transporte: RMT, Unite, Aslef y TSSA. Desde la fecha hasta hoy, las huelgas no cesaron y se multiplicaron. Mick Lynch, secretario general de RMT, declaró que solo el 11% de los trenes mantendrá su servicio y se disculpó con los usuarios por los inconvenientes pero ratificó la importancia del paro. «El gobierno provocó este conflicto proponiendo reducir nuestros puestos de trabajo, las jubilaciones y los salarios frente a la inflación» , manifestó Lynch a la BBC. En Reino Unido actualmente se enfrentan a una inflación interanual que roza el 10% , un número sin precedentes que causa preocupación de cara al invierno que se aproxima. Los británicos dudan de si podrán usar la calefacción y pagar su hipoteca. Tras el fallecimiento de la Reina Isabel II , desde los sindicatos habían anunciado una tregua en sus movilizaciones pero en los últimos días se reanudaron, remarcando la importancia de los reclamos. Además de los trabajadores ferroviarios, otros sectores como carteros, abogados penalistas y recolectores de basura se sumaron a las huelgas y exigen una mejora en la calidad de vida en general. Hasta el momento no se conoce una fecha de finalización del paro de trenes, pero sí está confirmado que la próxima semana continuarán las huelgas en los trenes y subtes de Londres