La Fraternidad es una de las primeras organizaciones sociales de los trabajadores en el país y la única de aquella etapa del siglo XIX que ha perdurado en el tiempo
Estono es casual, ya que desde sus comienzos, sus hombres dieron muestra de unaprofunda e inquebrantable voluntad de pujanza, de crecimiento, de esperanza,aún en los momentos más críticos, desalentadores y dolorosos.
Desdeaquellas épocas de la primer Comisión Directiva, pasando por las luchas parcialesde 1896, la brutal derrota de la huelga de 1912, la victoriosa huelga del 17 -que alcanzara nuestro primer Reglamento Laboral – con el Pacto de Solidaridadcon la vieja (FOF) Federación Obrera Ferrocarrilera, o en la conformación de laprimera Confraternidad Ferroviaria en la década del 20 junto a la UF – ensayogremial que alcanzó casi una década – y que fracasó por el sectarismo venal queaún abonan algunas direcciones obreras mediocres y subalternas que prefieren alos trabajadores desunidos y de rodillas a los políticos de turno.
NuestraOrganización maduró junto a sus hombres, se nutrió y aprendió de sus errores yde sus fracasos.
Enépocas de júbilo y bonanza junto a nuestro pueblo o sublevados contra lainjusticias como en 1961 contra el Plan Larkin de Frondizi, Alzogaray y elF.M.I.,
Y pesea la derrota siguió luchando por la reorganización del gremio pese alachicamiento de la industria.
Frentea la dictadura genocida sus hombres enfrentaron las injusticias, son muy pocoslos que recuerdan la épica de las seccionales Circunvecinas que se animaban aenfrentar al régimen y que terminó por llevarse a la cárcel por 8 meses a laComisión de Reclamos de la Tracción Eléctrica a los compañeros Páez, Quiñónez yZumbón,.
Recordarnuestros hombres es parte de la Memoria Histórica.
Pesea la derrota en la dictadura, pese a la cárcel, a la persecución, a las cesantíasque sufrieran – entre tantos otros – el negro Carlos Zamora, aquel militanteferroviario que de joven en su Rosario natal no bajó los brazos e intentó coparun cuartel junto con jóvenes peronistas que bregaban por el regreso del Gral.Perón.
La Fraternidadperduró, perdura y perdurará en el tiempo porque se nutrió de hombres condecisión, con coraje, lealtades y convicciones.
Lasque llevaron a hombres como Omar Draghi en los 80 a no romper los pactos desolidaridad entre las Seccionales de la T.E., o que cuando las empresasviolentaban nuestras luchas en los 90, no dudaron en cortar las vías y terminarencauzados judicialmente junto a sus compañeros de la Seccional Lynch.
Losque pese a la mayoritaria apuesta al neoliberalismo de los 90, como el Chicle Coria se robaron un Tren de Pasajeros para demostrar simbólicamente quelos ferroviarios no queríamos perder los trenes interurbanos.
La Fraternidad es eso, nada más queeso, pero precisamente “nada menos” que eso, unaflexible mixtura plural, cuya máxima expresión fue la Confraternidad Ferroviaria a la que adhirieron y se sumaroncompañeros como Zamora, Volpi, Coria,Draghi, Zelaya, Arias, Charbonier, cuyas ideas eran tan distintas, pero quecon esmero, trabajo y dedicación fuimos sumando y multiplicando hasta alcanzaruna Unidad Monolítica que expresa ala inmensa mayoría de nuestros compañeros.
La Fraternidadperdurará mientras exista compañeros como ellos, ejemplos de simpleza ysencillez, pero sobre todo Lealtad y Compromiso militante.
Honramossu memoria, predicando sus ejemplos.
Omar Maturano
Sec. Gral.
La Fraternidad